Novelas ligeras en español

viernes, 17 de noviembre de 2017

Sono mono capitulo 189

Me moví a la dirección que la Diosa del Mar señaló y mientras estaba preguntándome si me estaba acercando, una ciudad realmente apareció. Para ser precisos, consistía de muchos barcos atados con cadenas y aparentemente estaba conformado por decenas de barcos, y en el medio había un gran barco que podía transportar a más de cien personas.

Reduje lentamente mi velocidad y me hundí en el mar con cuidado para no perturbar la superficie del agua y comencé a nadar. Pude haber atacado así pero como no sé dónde están recluidos Navirio y su tripulación, no puedo ponerlos en peligro por descuido.

Nadé así hasta el barco más cercano y me infiltré por el agujero del casco donde estaba instalado uno de los cañones.

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Me infiltré sin problemas pero no había nadie aquí. ¿Eh?

Este es un barco pirata, ¿cierto? ¿Por qué entonces no hay gente? ¿No tienen que estar vigilantes? Ahora que lo pienso, estamos en el mar. No hay tierra ni islas en las cercanías. Ya veo, ellos piensan que aquí, nadie será capaz de tocarlos. Pero qué lástima, porque ya estoy aquí. Estarán acabados si le hicieron algo a mí cuñado Navirio y a mi mejor amigo Orlando. O más bien, incluso si no lo hicieron, no puedo dejarlos vivos. Se decidió que exterminaría a todos los piratas aquí. Mis condolencias.

Cuando salgo a cubierta, examino la situación y entiendo que la gente se está reuniendo en el gran barco del centro. Ya que puedo escuchar fuertes ánimos desde allí.

Empiezo a saltar de barco en barco y me acerco al gran barco en el centro para examinar la situación.

En la cubierta hay una gran reunión de piratas, y parecen estar dando vueltas a algo en el centro porque están todos empaquetados juntos. En el centro hay una pirata femenina con cabello rubio sombrío usando un gran sombrero de pirata, un gran abrigo negro y grueso está colgando de sus hombros, y frente a ella estaban Navirio y compañía atados. Me alegro de que todavía estén bien. La pirata agarra la barbilla de Navirio y lo levanta para revisar su rostro girándolo hacia ella.

[Fufufu, Tu cara está en mi zona de strike… Me gustas, te daré mucho amor.]

En el momento en que escucho eso, salto desde donde estoy hacia el círculo de la cubierta y grito.

[¡¡No vengas aumentando mis problemas!!]

Y así le lancé un puñetazo a la pirata que había capturado a Navirio con la velocidad suficiente para que ella pueda evitarlo y, naturalmente, ella lo evitó y se alejó de Navirio. Bueno, esa era mi intención y me preocuparía si no lo hubiera esquivado. No es que esté tratando de matarla. Aunque si fuera una cuestión de vida o muerte, estaríamos hablando de manera diferente… Me pregunto si ese día alguna vez vendrá…

Justo cuando aterrizo frente a Navirio, la pirata reacciona gritando “¡Mátenlo!” y los piratas vienen a atacarme con sus armas.

Con un movimiento instantáneo, derribo a todos los piratas en un abrir y cerrar de ojos y regreso al lugar donde aterricé. Viendolo desde el punto de vista de los piratas, además de no saber que ocurrió, comenzaron a ver que sus camaradas salían volando. En ese momento corté las cuerdas que enlazaban a Navirio y compañía con un hacha que le robé a uno de los piratas que me atacó. Los otros caballeros además de Navirio y Orlando parecen ser los que estuvieron en esa batalla porque me recordaron y me dieron su agradecimiento. Aprovechando la confusión de los piratas que todavía no saben lo que está pasando, los ahora libres Navirio y Orlando me llaman.

[Ha pasado un tiempo Wazu, nos salvaste.]

[Estoy feliz por nuestra reunión, pero ¿qué estás haciendo aquí?]

Al escuchar las palabras de gratitud de Navirio y ver la cara sorprendida de Orlando, también hago una sonrisa.

[Bueno, pasaron muchas cosas… Dejémoslo para más tarde…]

En ese momento, los piratas elevaron su vigilancia hacia mí y hacia Navirio y compañía liberados, y con armas a la mano lanzaron cargas de intenciones asesinas hacia nosotros.

[Disfrutaré de ese hombre pelirrojo más tarde, ¡así que déjenlo con vida! ¡Maten al resto! ¡Enséñenles dónde están ahora mismo!]

¿Dónde estamos? En la fortaleza de unos cien piratas, ¿verdad? En cambio, te enseñaré con quién estás tratando.

Me di cuenta de algo cuando estaba mirando a los piratas que quieren atacarnos. ¡Lo arruiné! ¡Navirio y compañía no tienen armas! Yo no necesito particularmente alguna, pero ellos sí. Me acerco a algunos de los piratas que se acercan, los envió volando mientras robó sus armas y luego se los doy a Navirio y su tripulación.

Navirio y compañía se enfrentan cara a cara con las armas que recibieron de mí a los piratas que los están atacando. También me mantuve observándolos mientras estaba golpeando a los piratas, pero como se esperaba de una tripulación de exterminio de piratas, no parece haber ningún problema.

Bueno, si hubiera algún peligro, me apresuraría a ellos. Pero ahora que los miró, sus ropas se ven harapientas y puedo ver impaciencia en sus caras. Bueno, no puedo culparlos, estaban cautivos hace un momento, por lo que no han descansado bien.

Así que, pensando en eso, empiezo a poner más fuerza en mi cuerpo para disminuir la carga sobre Navirio y compañía incluso por un poco. Y en ese momento vi una buena abertura en el camino de la proa del barco, así que nos movimos hacia allí.

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En unos minutos, el final ya estaba a la vista.

En la proa del barco al que nos dirigimos ya estaba una pequeña montaña de unas cien personas. Por supuesto, dentro de esas personas no estaba Navirio ni su gente. Esa montaña estaba compuesta de los piratas que estaban aquí. Es gracias a que me muevo rápidamente y los mandé a todos a volar allí.

Ahora solo quedaba la jefa, la pirata femenina era la única que quedaba en pie…

[¡¡Imposible!! ¡¡Somos los piratas que gobiernan estos mares!!]

Eso es incorrecto. El que gobierna el mar es la Diosa del Mar, o así pensaba. O más exactamente, ella fue la que te vio aquí. Aunque todavía plantearé objeciones sobre el asunto anterior…

[¡Ríndete ahora!]

Pero bueno, en este momento, esa pirata está siendo rodeada por Navirio y sus hombres y ella no tiene a dónde ir. Poco después, Navirio le dio un golpe en sus órganos vitales y la hizo perder el conocimiento.

Y solo después de ver eso fui capaz de respirar relajadamente…

¡Me alegra que Navirio y compañía estén bien!

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