Novelas ligeras en español

sábado, 4 de febrero de 2017

Summoned Slaughterer capitulo 24

Al final de la madrugada Hifumi y las demás partieron de la frontera. Después de pasar rápidamente a través de Fukaroru, aceleraron hacia la capital real.

Después de almacenar el carro, procedieron a caballo. Origa y las otras no estaban llevando a nadie, por que Alyssa se estaba aferrando a la espalda de Hifumi montando el mismo caballo.

“Maestro, ¿Qué esta planeando hacer a partir de ahora?”

“Como se lo dije a Pajou, me reuniré con Imeraria. Voy a resumir el asunto en ese momento, así que esperen hasta entonces. Y aunque puede ser demasiado pronto, al llegar a la capital tengo la intención de hablar sobre liberarlas; Esa es lo que pienso.”

“Pero si no capturamos a Beirevura, no seremos capaces de demostrar nuestra inocencia, ¿Cierto?”

En su caballo corriendo en paralelo, Kasha miró hacia atrás al camino que le recordaba los días brillantes y alegres que vivió.

“El nombre de Beirevura aparece en los documentos obtenidos en Vichy. Incluso podemos etiquetarlo como el espía principal. Y aunque el testimonio de Alyssa, que está siendo escoltada en estos momentos, también es necesario, lo que tenemos y sabemos debería ser suficiente por el momento“

La conspiración del vizconde de Vichy dio lugar a que dos mujeres aventureras fueran acusadas falsamente y se convirtieran en simples esclavas. Estas dos chicas fueron rescatadas por el casi-caballero y aventurero con una misión secreta Hifumi, e incluso ayudaron en el rescate de una chica que estaba a punto de ser asesinada por sus compañeros.

Por otra parte, la declaración que se le dará al resto del país ya había sido decidida, lo que provocó que ha Pajou se le solicitara transmitir ese mensaje a Imeraria.

“… ¿Va a estar bien?…“

Al escuchar la explicación de Hifumi, Alyssa se sintió como si estuviera siendo tratada como una trágica heroína.

Después de llegar a las cercanías de la capital sin ningún problema importante, se encontraron con un grupo de caballeros de pie en el borde de la carretera.

“Hey, ha pasado un tiempo”

Uno de los caballeros era Midas.

Bajándose de su caballo, Hifumi levantó la mano y lo llamó.

“Ha sido un largo tiempo, Hifumi-san”

“… ¿Qué pasa? ¿Por qué tan formal?”

“No se trata de mí. La información que Hifumi-san entrego…. Ha causado que el Castillo real cayera en una situación de pánico. Por el momento, la reina Imeraria ha anunciado este incidente a la población, y ha decidido una recompensa por sus esfuerzos.”

Hifumi había previsto que los países vecinos encontrarían en la ausencia de un rey y en la dificultad financiera un momento ideal para probar su suerte. Sin embargo, el estado actual era demasiado extraño como para que lo ignoraran. Por lo tanto, haciendo uso del permiso de la Reina y del hecho que había entrado en Vichy unas cuantas veces, Hifumi había elegido llevar a cabo una gran estrategia e inmovilizarlos proclamando los errores de Vichy.

En este punto, Imeraria debería haber conseguido un poco de apoyo. Ella estaba manipulando temporalmente al príncipe recién coronado, y guiando a la nación como su verdadero líder.

“Además, ha estado discutiendo el asunto sobre su promoción”

“Si, ¿Seré un caballero?”

“No es así…”

Hifumi, ya se había vuelto un rumor en el gremio, sus acciones en Vichy fueron tan llamativas que la ciudad real estalló en alborotos salvajes. Sin nadie que hablara sobre la posibilidad de una guerra, y proclamando a un héroe que había aparecido durante estos tiempos tranquilos, la gente común no podía evitar sentirse tocada, con una historia de un hombre joven que llevo a cabo una trágica venganza por unas mujeres y salvándolas en el proceso.

Así que castigar a Hifumi ahora, teniendo en cuenta que los ciudadanos todavía no se han recuperado de la repentina muerte de su Rey, sólo conduciría a la enemistad entre el pueblo y la corona.

“A pesar de que aún no esta decidido, el título está obligado a estar muy por encima de un caballero común. Hemos venido para acompañar a Hifumi-san al castillo y protegerle de la multitud. Al contrario de nuestras expectativas, usted ha llegado con bastante rapidez”

“Y, ya que será promovido a un rango mayor al de un caballero como yo, algunos lo llamaran un héroe y otros simplemente lo ignoraran.”

Midas dijo eso mientras parecía transmitir una amarga sonrisa; Hifumi asintió y pidió que prepararan un carruaje.

“Honestamente, nosotros habíamos pensado que Hifumi-san se movería de forma mas discreta. Incluso después de convertirse en un noble, usted había dicho que quería un estilo de vida más libre…“

“No esperen que actué de acuerdo a los deseos de los nobles o países”

Después de que el carro ya había sido preparado, Hifumi saltó sobre su caballo y mirando hacia abajo a Midas, se rió.

“Tenía la intención de crear esta situación.”

“¿Eh?”

“A pesar de ello, no esperaba destacar tanto. Bueno, ha sido un largo tiempo; vamos a encontrarnos con Imeraria.”

Hifumi se fue adelante, y Midas corrió para alcanzarlo.

Un gran grupo de personas se había reunido cerca de la puerta principal esperando el regreso del héroe.

Tal ves motivados por la falta de acontecimientos en los últimos años, y debido al rumor de que Hifumi llegaría pronto, las personas se habían reunido en la puerta para echar un vistazo a este héroe que luchó por la justicia y salvo a las dos esclavas “Bellezas” y a la “Niña bonita”.

Incluso cuando el rey había fallecido repentinamente debido a una enfermedad, las personas no reaccionaron con tanto interés; y aunque era un funeral, el silencio de la ciudad real podía atribuirse al hecho de que lo tomaron como el problema de un extraño.

La gente incluso trajo puestos de comida, mostrando la fuerza del apetito económico de la ciudad.

“En cierto sentido, soy una traidora de Vichy, no me esperaba este tipo de bienvenida…”

Alyssa, que estaba en el carro, comenzó a llorar por el nerviosismo al ver el gran alboroto que la ciudad estaba haciendo.

“Parece que nosotras y Kasha no seremos tratadas como extras del Maestro en esta ocasión.”

“En serio, sea como sea. La mayoría de las veces no entiendo lo que el Maestro está pensando, pero no puedo hacer nada sobre eso en este momento.”

De la conversación de Midas y Hifumi, las tres entendieron que ellas también tenían que acompañar a Hifumi al castillo. Lo que provocó que se preocuparan.

Sentada en el asiento del cochero, acabando de rendirse en intentar comprender los pensamientos de Hifumi, Kasha se sentía ansiosa, debido a que entraría al castillo por primera vez.

Mientras las ruedas del carro comenzaron a girar, las puertas de la ciudad fueron abiertas, liberando a un pueblo, que cuando finalmente encontró al grupo de Hifumi, levanto su voz.

“Kasha. Detente un segundo delante de la puerta”

“Entendido”

Asintiendo a las órdenes de Hifumi, Kasha redujo la velocidad.

Después de ir directamente hacia la puerta, y detener su caballo, Hifumi se dirigió a la multitud.

“¡Despejen el camino! ¡Tengo que ir a expiar mis pecados donde Su Alteza Imeraria!“

El pueblo, que había estado esperando el triunfal regreso de un héroe, fue confundido por sus palabras. Todos volvieron a verse los unos a los otros, murmurando.

“He oído de los caballeros que han venido a mi encuentro. Que he sido aceptado favorablemente. ¡Y tienen mi agradecimiento! Pero, he cruzado la frontera, y matado a un hombre para salvar a una chica. Por lo tanto, he traspasado mi autoridad y traicionado la confianza de Su alteza… ¡Por esa razón, he venido para confesar mi pecado y aceptar mi castigo!”

La conmoción sólo se enfureció.

“¡Pero estas chicas no tienen la culpa! ¡He venido a decirle eso a Su Alteza! ¡Aunque deba perecer en la horca mañana, les pido con gusto que le den la bienvenida a estas chicas en mi lugar!“

¡Tal vez por que Hifumi se acerco a la gente implorándole con grandes gestos, o quizá por cómo se dirigió hacia ellos! Y que aun a pesar de que es un noble, por el bien de las personas… no, por el bien de unas esclavas y de una persona de otro país estaba dispuesto a aceptar un castigo, y con el fin de salvarlas, se presentaría ante la Reina.

Por otra parte, debido a la insistencia de Hifumi, Alyssa y Origa se inclinaron sobre el carruaje. Incluyendo al conductor, estas fueron las chicas que el intentaba proteger; sus rostros jóvenes inspiraba en la gente el deseo de protegerlas.

“Esas chicas son las esclavas que el dice…”

“¡Ellas se convirtieron en esclavas por culpa de esos bastardos de Vichy, sabes!”

“Ese caballero-sama, a pesar de que es un poco bajo, es un hombre sorprendente”

“Su aura es muy diferente a la de otros caballeros, ¿Verdad?”

“¿Ellos iban a matar a esa chica?”

“¡Esos bastardos de Vichy son unos demonios!”

Murmullos de verdad y chismes se extendieron entre la multitud, pero todos lanzaron alabanzas hacia Hifumi y expresaron su compasión por Origa y las demás chicas.

Mientras el murmullo aun seguía extendiéndose, Hifumi avanzo en su caballo con la intención de encontrarse con la reina – y se inclinó ligeramente para instar a la gente a despejar el camino.

La multitud se separo para crear un camino en todo el transcurso hacia las puertas del castillo real.

Y con una expresión humilde, Hifumi continuo avanzando.

Cuando se dio la vuelta para ver hacia atrás, vio a Kasha en el asiento del cochero congelada debido a la ansiedad, y al cuerpo de caballeros de Midas con una expresión agria en sus rostros.

A medida que avanzaban a través de la calle, una multitud de voces llamaban al grupo de Midas pidiéndoles que salvaran a Hifumi. Incapaz de aceptar o negar esa solicitud, los caballeros decidieron evitar el contacto visual con las personas de la multitud, lo que sólo aumento la ansiedad de la gente; como resultado, la multitud sólo se hizo más ruidosa.

(Los caballeros están acostumbrados a esto, eh. Ahora bien, ¿Que es lo que la reina piensa sobre esto?)

Cuando Hifumi dirigió la mirada hacia el castillo, vio a una sola chica de pie en el balcón.

Cuando Hifumi pasó a través de la puerta del castillo, la puerta de acero se cerró detrás de él.

Como avanzaron tranquilamente a través de la ciudad, la gente los acompaño fielmente durante todo el camino hacia el castillo.

En el otro lado de la puerta, algunos gritos solicitaron la misericordia de la corona, mientras que otros la criticaron fuertemente.

Hifumi bajó de su caballo, y las tres chicas salieron del carro.

“Por favor, déjeme los caballos a mí. Y por favor, reúnase con su alteza.”

“Está bien”

Después de dejarle los caballos a Midas, fueron guiados al castillo por uno de los caballeros.

Los caballeros en el interior, a diferencia del momento en que Hifumi había dejado el castillo, ahora estaban viéndolo con miradas llenas de maravilla.

Como sus miradas también se centraron en Alyssa, Origa, y Kasha, ellas se sintieron incómodas.

“… Por favor, espere en esta sala”

Después de que el caballero dijo eso, una sirvienta abrió la puerta.

Antes de entrar, Hifumi dijo.

“Gracias por mostrarme el camino. Sin embargo, las tres personas que se esconden dentro de la habitación, son una molestia: Salgan”

Al no sentir la presencia de las personas adentro de la habitación, la sirvienta miro sorprendida a Hifumi sin saber de lo que estaba hablando, pero el caballero que estaba a su lado comenzó a temblar.

Pajou y Midas no harían algo como eso, pero el primer cuerpo de caballeros del castillo aun no debe haber oído sobre las habilidades de Hifumi.

“Q-qué estás…”

“No se hagan los tontos… bueno, supongo que así está bien”

Después de entrar en la habitación, Hifumi apuñaló con la hoja de su espada la pared de atrás de un jarrón decorativo y la pared del lado contrario la cual esta decorada con una pintura.

Se escucharon algunas voces de agonía desde el otro lado de la pared, y la sangre estaba fluyendo desde ella hasta el suelo.

“El individuo en el techo parece haber escapado, eh. No seré tan indulgente la próxima vez.”

Aturdido por las acciones de Hifumi, el caballero se quedo viendo hacia el lugar donde sus compañeros yacían muertos, mientras entraba en pánico.

La sirvienta, incapaz de comprender lo que acababa de ocurrir, se quedó sin habla.

“¿Podrías traernos un poco de té? Para algunas personas.”

“¡P-por favor espere un momento!”

Después de llamar a la sirvienta, Hifumi se dejó caer en el sofá. En realidad no tiene la actitud de alguien que viene para ser castigado por sus pecados.

“… No ha perdonado a ninguno de ellos”

“Perdone a ese tipo, ¿No?”

Mientras respondía al comentario de Kasha, refiriéndose al tipo del techo que dejo escapar, Hifumi arrojó la katana en el almacenamiento.

“Siéntense también. Todavía tenemos mucho trabajo que hacer.”

Tal vez preguntándose por qué el té había tardado, Hifumi estiró su cuerpo con una expresión distante en su rostro; Al ver esto, la ansiedad de las chicas no podía hacer nada más que aumentar.

“¡Su Alteza Real, la Reina Imeraria!”

Mientras Hifumi estaba bebiendo casualmente el té, una sirvienta llamó a la puerta y anunció eso.

Después de que la sirvienta se movió de la puerta, entró Imeraria. Al ver los dos charcos de sangre, ella frunció el ceño.

“Por favor dile al caballero que me acompañó hasta aquí, que regrese más tarde”

Ella le dijo eso a la sirvienta que estaba colocando el té frente a su asiento, y le ordenó que no dejara entrar a nadie en la habitación durante un tiempo.

Después, Imeraria se sentó frente a Hifumi.

Ella seguía tan digna y hermosa como cuando se conocieron.

“Ha sido un tiempo, eh. He oído que estás manejando las cosas bastante bien.”

“Si es posible, hubiera preferido no encontrarnos de nuevo… pero os he causado grandes inconvenientes con el incidente del Marques Raghlain y el del Vizconde Hagenti. Por otra parte, los caballeros de aquí también han actuado en exceso…”

Imeraria dirigió su mirada a las partes del suelo manchadas de sangre.

“No se preocupe. Además, estoy dando un buen uso al tercer cuerpo de caballeros.”

“Ahora bien, ¿Usted tiene algo que decirme?”

“Ah, antes de eso, creo que tiene algo en mente, ¿No?”

Suspirando profundamente, los ojos de la reina se desviaron de Hifumi y se concentraron en Alyssa.

“Alyssa, ¿verdad? He recibido el informe.”

“¡S-sí! Umm… cual… ¿Cuál será mi destino?“

Con una suave sonrisa, Imeraria trató de transmitir en su voz toda la dulzura que fuera posible.

“No se preocupe. Usted será tratada como una ciudadana de este país. Y si lo desea, ¿Podría trabajar aquí en el castillo?“

“Um, sobre eso… todavía tengo que pagar mi deuda con Hifumi-san….”

“Ya veo. No dude en venir a buscarme cuando lo desee.”

“Gracias…”

Sonriendo a Alyssa, una vez más, Imeraria volvió a mirar hacia Hifumi.

“Veo que usted ha manejado muy bien las cosas.”

“Sí, de alguna manera”

“Eso fue sarcasmo”

“Lo sé”

Bebiendo su té, Imeraria continuó.

“He recibido el informe de Pajou. Como se esperaría de ella, el informe también cubría la información contenida en los documentos que están en su posesión. Y gracias a la conmoción de afuera, mis manos están atadas, así que tendré que reconocer a Hifumi-sama como un héroe y hacer que nuestros embajadores en Vichy y Horant les transmitan una noticia desagradable.”

Por otra parte, Imeraria continuó,

“Origa-san, Kasha-san”

“¡Sí!”

Origa respondió mientras Kasha estaba sorprendida.

“Debido a los podridos nobles de este país ustedes fueron degradadas a esclavos; como representante de la familia real que controla a todos los nobles, les expreso mi más profunda disculpa. Me disculpo por mi incapacidad para hacerlo públicamente y espero que acepten mis disculpas.”

“Alteza, aunque lamentamos habernos convertido en esclavas, no nos hemos enfrentado con ninguna desgracia después de haber sido compradas por el Maestro. Por otra parte, hemos sido capaces, con nuestras propias manos, de llevar a cabo nuestra venganza…”

Kasha simplemente asintió ante las palabras de Origa, incapaz de decidir si tenía o no el derecho de dirigirse directamente a la reina. Sin embargo, igual que Alyssa, también era bastante pobre con las palabras.

“Sus palabras pusieron mi corazón en paz. Dado que el de ustedes es un caso especial, hare que los magos del castillo retiren sus tatuajes de esclavo. Ordenare que esto se haga de inmediato, así que por favor vivan libremente a partir de ahora.”

“Le damos las gracias por mostrar tan inesperada benevolencia.”

Origa y Kasha bajaron la cabeza profundamente.

“Por otra parte, me gustaría que Hifumi-sama se convierta en un vizconde y gobierne sobre Fukaroru y los pueblos de los alrededores en lugar del vizconde Hagenti.”

“¿Oh? Sin embargo he venido a recibir un castigo.”

“Por favor deje de bromear sobre eso. Si castigáramos a Hifumi perderíamos la buena voluntad de la gente. ¿En serio espera que haga algo tan desconsiderado?“

Hifumi fue sorprendido una vez más por lo bien que Imeraria se comportaba como estadista. Al mismo tiempo, decidió hacer uso de ella lo mejor posible.

“Mi error. Aceptare de buena gana el título. Tampoco podría esperar un mejor territorio.”

“¿De buena gana? ¿Está planeando algo de nuevo?“

Imeria preguntó con preocupación en su rostro; Hifumi simplemente bebió un poco de té y respondió.

“Aplastaré Vichy. Tan horriblemente que nunca mas volverán a pensar en meterse conmigo“

Y la expresión que mostro en su rostro robó el aliento de todo el mundo en la habitación…

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